Insólita situación se dio en pleno cacerolazo de vecinos de un barrio cerrado, en la localidad bonaerense de Pilar, contra la detención domiciliaria del empresario Lázaro Báez en una vivienda de ese exclusivo lugar. Una periodista de Telenoche alentó a los manifestantes a que canten en vivo para rechazar la medida de la Justicia.
Cuando María Laura Santillán manda al móvil que estaba en el ingreso del country Ayres del Pilar para escuchar la consigna que cantaban los manifestantes, la cronista avisó: "Se estaban preguntando qué estaban cantando. Vinimos al aire y han dejado de cantar".
Acto seguido, se dirigió a los enojados manifestantes y reclamó: "Les pido, por favor, que sigan así escuchan los que están en el piso". Y no tardaron en entonar: "No queremos chorros". Frase que Santillán repitió en el piso.
Luego de que el Tribunal Oral Federal número 4 le otorgara a Báez la excarcelación, su entorno aseguró que vivirá allí junto a su actual pareja, una vez que pueda pagar la fianza que se dispuso mediante un seguro de caución.
Los vecinos señalaron que la vivienda "está deshabitada", aunque en los primeros meses del año observaron que se realizaron algunas reformas en ella.
La abogada de Lázaro Báez, Elizabeth Gasaro, aseguró que "era absurdo" que el empresario ligado a la familia Kirchner siga preso, en tanto que remarcó que "es imposible pagar la fianza" que fijó la Justicia ya que "se apropiaron" todas sus empresas.
"Luego de más de 4 años logramos que se establezca el estado de derecho y tenga los mismos beneficios que cualquier persona detenida en estas circunstancias. Era absurdo que siga preso, la fianza es imposible, no hay manera de pagar $632.500.000", expresó