32 cachorros de raza Beagle serán usados en Barcelona para hacer un experimento y luego serán sacrificados. La entidad responsable de esto es la Fundación Parc Cientific, de la Universidad de Barcelona, que planea utilizar a estos cachorros para probar un nuevo fármaco. La polémica fue tan grande que trascendió en distintos países y una vez más se puso en tela de juicio la experimentación en animales.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, expresó su repudio y le reclamó a la consejera de la Generalitat, Teresa Jordà, “que evite el sacrificio de 38 cachorros de perro Beagle en el estudio farmacológico que está impulsando Vivotecnia por encargo del Parque Científico”. “38 cachorros Beagle podrán ser asesinados, salvo que la presión ciudadana lo impida. Le pedimos a la Generalitat que ejerza sus competencias y proteja los derechos de los animales. Barcelona siempre estará en contra del maltrato animal”, sentenció.
El experimento consiste en probar un antifibrótico pensado para personas con mielofibrosis y fibrosis hepática en estos cachorros con una dosis durante 28 días seguidos. El objetivo de esta prueba es probar cuánta cantidad de sustancia resisten los perros antes de morir, dejando sin vida a más de la mitad de ellos y, finalmente, sacrificándolos a todos para hacer necropsias.
La idea de este experimento es dividir a los cachorros en cuatro grupos diferentes: un grupo de control, otro que recibirá una dosis baja, otro intermedia y otro alta. Una vez fallecidos, estudiarán varos órganos de su cuerpo, como el cerebro, el corazón, los pulmones, el páncreas, el hígado y muchos otros más para analizar el efecto del fármaco.
Si bien las pruebas en animales son moneda corriente en la ciencia, este caso en particular despertó la indignación de la población española y fue calificado por muchos como maltrato animal. La fase de experimentación está pactada para mediados de marzo y varias entidades de España se están movilizando para evitar que ocurra.
La respuesta de la Universidad de Barcelona a las críticas por la experimentación en Beagles
En respuesta a los reclamos, la Universidad de Barcelona expresó que no son ellos los que esperan realizar este experimento sino “una empresa externa que no pertenece al Parque Científico de Barcelona sino que está alojada en él, como tantos otros grupos y entidades externas”.
La Universidad también explicó que el problema es que hasta el día de hoy no hay otra manera de hacer experimentos científicos sin experimentar en animales pero que de todas formas se realiza únicamente “cuando es estrictamente indiscutible”. Por otro lado, también destacó que es la Comunidad Autónoma de Madrid la que autoriza esta actividad.