El periodista Jonatan Viale se recuperó de coronavirus y después de un mes volvió a conducir Pan y Circo en Radio Rivadavia. En el pase con Baby Etchecopar compartió una experiencia mística cuando estuvo internado en la que aparecía su padre, el periodista recientemente fallecido tras haberse contagiado el mismo virus Mauro Viale.
El periodista aprovechó el espacio para contar el mal momento que pasó cuando dio positivo en la prueba diagnóstica del virus al igual que su mujer Micaela Krolovetzky, y sus hijos Romeo y Rafael. “Yo tuve mucho miedo, me pegué un cagazo de novela”, expresó Jonatan, sin pasar por alto el temor que sentía tras la muerte de su padre, Mauro Viale, a causa de las complicaciones que le generó el mismo virus.
“Tuve cinco noches con 39 (de fiebre), el oxímetro de mierda que me hacía recordar a mi viejo”, confesó el conductor al tiempo que reveló que volvió a hacer terapia psicoanalítica debido a que, durante sus días de aislamiento, sufrió ataques de pánico: “Es un espanto, empezás a temblar. Estaba en la cama y no podés controlar el cuerpo”, lamentó.
En este sentido, recordó que el 11 de abril murió Mauro Viale y, un mes después, contrajo el virus. “Me arruinaba por mi viejo. El último audio de WhatsApp de mi viejo era con el ruido del oxígeno. Si me ponían el oxígeno no sabemos qué iba a pasar, por ahí me agarraba un ataque de pánico muy fuerte y me tenían que sedar", relató.
"Fueron 5 noches con 39 de fiebre, subió la inflamación pulmonar, de 3 a 12, o sea se hinchó el pulmón, por la reacción que hace el cuerpo al coronavirus”, continuó el periodista al tiempo que puso en común una fuerte experiencia mística tras internarse en la Clínica Suizo Argentina: "Ese viernes, fue increíble lo que pasó, me dormí una siesta con 38 de fiebre, nunca bajaba la maldita fiebre", adelantó.
"Me dormí y soñé una cosa muy impresionante. Ya saben que soy racional, cero metafísico, si creo en Dios, pero me gusta todo lo que se puede ver y tocar. Soñé un abrazo muy fuerte, muy real de mi vieja, mi viejo, mi hermana y yo. Los cuatro abrazados. Me levanté todo transpirado y nunca más tuve fiebre. Nunca más tuve fiebre hasta el día de hoy”, compartió conmovido.