Los periodistas Luis Ventura y Adrián Pallares tuvieron un encuentro televisivo y comentaron cómo fue su encuentro cuando el ex panelista de Viviana Canosa arribó en Intrusos, después de muchos años de ser competencia. En su descargo, el conductor de Secretos Verdaderos se sinceró sobre su personalidad y su rigurosidad a la hora de tratar a sus amigos y enemigos.
“La vida te trae sabiduría, el tema es saberla tomar o dejarla afuera. Yo soy un tipo de buena voluntad, lo fui siempre. Siempre dije que soy el mejor amigo o el peor enemigo. Si te ponés solo del lado de enfrente te voy a pelear. Tuve una charla a solas con Horacio Cabak en el camarín, y con vos, Adrián, cuando venías de un programa competidor. Y vos sabés lo que te dije. Es mi manera”, expresó Ventura en relación a su manera de llevar los vínculos en su vida y sacó a colación un tema del pasado con Pallares.
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Luego, el ahora conductor de Intrusos también se expresó sobre su llegada al clásico programa de espectáculos, tras haber sido desvinculado de Más Viviana. “Cuando yo empecé fue justo una semana en la que Luis no estaba, entonces había hablado con todos, menos con Ventura. Y yo dije ‘tengo que hablar con él en algún momento’. Yo venía de jugar en la contra”, relató Pallares y Ventura agregó: “Nos habíamos cruzado con algunos palos mediáticos. Pero para mí un compañero es un compañero”.
La rivalidad entre Viviana Canosa y Jorge Rial fue una de las más icónicas de la televisión argentina durante muchos años y, cada uno desde su programa, se lanzaban fuertes dardos. De esa manera, el pase de Pallares a Intrusos supuso una gran sorpresa para todo el público e incluso para los mismos integrantes del ciclo de América TV.
Reconciliación con Marcela Tauro
Luego, Luis Ventura se refirió a cómo fue su acercamiento con la periodista Marcela Tauro, tras varios años sin hablarse después de compartir Intrusos. “Ella trató de acercarse varias veces y yo no quise porque yo me conozco. Yo no dejo salir a la fiera, porque sé que está adentro mío que tengo enjaulada, entonces parezco un buen tipo. Pero cuando entro en una pelea soy bravo”, reveló y continuó: “Ella me iba a contar lo que le había pasado a ella y yo le iba a tener que decir lo que yo recibí. Estaba herido en toda la vida, en el alma, y me tiraban sal. Nos juntó Fantino. Para mí Tauro era una hermana, almorzaba con ella todos los días a la salida de Intrusos”.