Dónde probar la mejor cocina peruana: 6 opciones para foodies, grupos y parejas.

12 de septiembre, 2022 | 13.02

La cocina peruana es de las más destacadas en el mundo y en Argentina existen restaurantes y bares que ya son todo un ícono. Con propuestas de autor y chefs reconocidos, los sitios gastronómicos que se pueden encontrar en la Buenos Aires son garantía de una experiencia única, desde Palermo y Retiro hasta Canning. Seis opciones para foodies, grupos y parejas.

Jarana, en Palermo

Astrid y Gascón, Osaka y La Mar. Esas son las referencias de la chef peruana Astrid Acuña, quien está al frente del restaurante Jarana que acaba de abrir en Palermo. Mientras aún lidera los fuegos Mudrá –local plant based asesorado por el norteamericano Matthew Kenney–, en su nuevo espacio recrea platos típicos de Perú con su sello personal. En un ambiente de estética cuidada, la fiesta de sabores no puede prescindir de dos clásicos: la causa de pollo –o una con ceviche cremoso y chicharrones de calamar– y el ceviche que se luce en diferentes versiones. Anticuchos, tiraditos, entradas típicas y múltiples piezas de sushi Nikkei completan la oferta fría. Dos rolls fuera de serie son el Sicaya (pesca blanca cocida con chimichurri, queso crema, verdeo, tempura, salsa huancaína, hilos de papa y polvo de aceitunas picantes) y el ¡Bien a lo Macho! (langostinos y vieiras a la parrilla, queso crema, cobertura de pesca blanca flameada con salsa A lo Macho y chicharrón de calamar). Pasando a los calientes, se encuentran desde opciones populares como el arroz chaufa con mariscos o el lomo saltado con papas doradas y arroz blanco, hasta creaciones de autor como una tentadora milanesa de ojo de bife con salsa huancaína y pappardelle. Una buena coordenada para salir en pareja o con amigos. Tip: No se pierdan los cócteles de autor a base de pisco.

Dirección: Fitz Roy 1722, Palermo.

Más información en: @jarana.bsas

Kamay Lounge, en Retiro

El Microcentro porteño esconde un lugar con auténtico sabor peruano. Kamay Lounge es el sueño hecho realidad del cocinero Raúl Zorrilla, discípulo del reconocido José Castro Mendivil en Olaya y La Catedral del Pisco, quien se luce con recetas de su Perú natal y algunas creaciones peruano-japonesas. El local tiene un pequeño salón en la primera planta y un sector más “nocturno” en el subsuelo, donde se ubica una gran barra pisquera (para arrancar la noche con cócteles de autor). El protagonismo se lo llevan sus platos extra abundantes y de gran calidad preparados con los productos más frescos del mercado. Se sugiere ampliamente el ceviche de pesca del día con leche de tigre y maíz cancha crocante; la causa Kuro Ebire (rellena de pollo, palta y tomates cherry, coronada con langostinos y huevos de codorniz); el arroz chaufa con omelette montado y anticuchos de lomo, pollo y langostinos; y el seco de costillar con Tacu Tacu (una mezcla crocante de arroz y frijol canario con costillar en salsa de cerveza negra y chicha de jora, ají amarillo y cilantro). El cierre va de la mano con postres típicos como el suspiro limeño y el domo de lúcuma bañado en chocolate y café.

Dirección: Marcelo Torcuato de Alvear al 975, Retiro.

Más información en: @kamaylounge

La Mar, en Palermo

En un listado de este tipo no puede faltar La Mar de Palermo, sede local de la prestigiosa cevichería peruana que lleva la firma de Gastón Acurio. Sin duda, el ceviche es el plato insignia de la casa y la puerta de entrada a otros manjares como tiraditos, anticuchos, sushi, causas, arroces, sudados, guisos y parrilladas de mar. Todos ellos evidencian una notable selección de materias primas y gran técnica culinaria aplicada en cada preparación. El ceviche Clásico no falla, pero para probar algo diferente se recomienda el Combinado (de pesca del día y chipirones fritos en leche de tigre al ají rocoto) o el Nikkei (de atún rojo en leche de tigre con ajíes peruanos y kimchi coreano). El arroz chaufa Aeropuerto es otro ícono del menú (lleva mariscos del día, fideos fritos y brotes de soja) al igual que el pescado del día A lo Macho (servido sobre un espesado de choclo verde con arroz colorado) y el bife Goloso (con tallarines en pesto peruano y papas a la huancaína). La carta es infinita y las opciones muy variadas. Para una ocasión especial, en su agradable salón o en su amplia terraza calefaccionada.

Dirección: Arévalo 2024, Palermo.

Más información en: @lamarbsas

Quechua, en Abasto

El Abasto es el hogar elegido por gran parte de la comunidad peruana y, gracias a esto, en sus calles podemos encontrar muchas propuestas gastronómicas. Quechua es una de ellas y vale la pena visitarla: un restaurante cálido y sencillo con el foco puesto en el sabor. El chef peruano Julio Marín lo fundó en 2016 tras su paso por La Rosa Náutica de Buenos Aires y Bogotá. Acá da rienda suelta a su creatividad, apoyándose en sabores típicos de su tierra: pesca fresca, mariscos, carnes, variedad de ajíes y hierbas aromáticas se combinan de la mejor manera. No faltan recetas populares como ceviches, causas, papas a la huancaína, arroz con mariscos y lomo saltado, pero llaman la atención innovaciones como el tiradito Quechua (láminas de lenguado y salmón rosado en salsa de morrón rojo, naranja y jengibre), el lenguado Bandera (filet de lenguado a la plancha con una base de champiñones, vegetales y pimiento piquillo, coronado con langostinos en salsa de camarón) y el arroz con pato (guiso de pato en cilantro con arroz verde y salsa criolla). Recomendado para ir en familia o con amigos y acompañar con cervezas peruanas o cócteles de la casa.

Dirección: Carlos Gardel 3163, Abasto.

Más información en: @quechua_bsas

Lamas, en Canning

En la zona más linda de Canning abrió Lamas, un imponente restaurant que combina lo mejor de dos culturas: la peruana y la japonesa. En este espacio de paredes vidriadas y techos altos, con un diseño moderno y atractivo, se degustan platos típicos peruanos, especialidades japonesas, sushi de autor y una interesante coctelería. Algunos recomendados del menú son sus cuatro variedades de ceviche, el risotto de lomo con salsa huancaína, la cazuela de mariscos al curry con arroz negro (lleva pulpo, mejillones, langostinos, calamar y salmón rosado) y la parrillada de mar para compartir. Su sección de sushi es para destacar, con alternativas de autor como el roll Parma (relleno de langostino rebozado y palta, cubierto con vieira en manteca japonesa y queso parmesano gratinado) y el Sublime (langostino, queseo crema, palta y mango envuelto en salmón rosado con topping de almendras, teriyaki y salsa de maracuyá). Un buen plan post visita al pintoresco Paseo Plaza Canning –inspirado en la Toscana– que se encuentra a pocos metros del local.

Dirección: Mariano Castex 1416, Canning.

Más información en: @lamas.resto

Páru, en Belgrano

Hace más de 12 años que Páru Inkas Sushi & Grill es referente en cocina Nikkei y cada año sorprende con nuevas preparaciones de la fusión peruano-japonesa. Si bien es reconocido por sus piezas de sushi, su carta incluye tiraditos, ceviches, woks y platos al grill que vale la pena probar. Por ejemplo, el nuevo Passion Ceviche (pescado blanco marinado en leche de tigre de maracuyá con camote y quínoa roja), el tiradito Páru (láminas de pescado blanco con salsa de ají amarillo, emulsión de cilantro, puré de camote y jugo de lima), el Picante de Mariscos (mix de mariscos cocidos con ajíes peruanos y crema, servido con croutones de mandioca y arroz blanco) y el Koika, un clásico de su sección Grill (chipirones rellenos de langostinos, queso y castañas de cajú con salsa panka-miso). combinados con una coctelería con toques peruanos donde predominan los piscos sours y sus variantes. Todos sus salones tienen una ambientación cuidada con mobiliario moderno y luces tenues, ideal para una cita romántica o entre amigas.

Dirección: La Pampa 717, Bajo Belgrano y más sucursales.

Más información en: @paru_sushi
 

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