Dónde está y cómo se formó la "Puerta al Infierno", el cráter que lleva 50 años en llamas

La "Puerta al Infierno" lleva 50 años dejando perplejos a los expertos, que no saben cuándo finalmente se apagará este cráter ubicado en el medio del desierto.

11 de mayo, 2021 | 17.02

Alrededor del mundo hay una incontable cantidad de paisajes y fenómenos naturales, con las más diversas causas y las consecuencias más variadas. Pero hay una imagen que es única en todo el planeta: la famosa "Puerta al Infierno", un cráter que lleva 50 años ardiendo y los científicos no saben cuándo dejará de hacerlo. Te contamos dónde está ubicado y cuál la historia de este particular fenómeno que aún deja perplejos a los expertos y que se convirtió en una de las principales atracciones turísticas de la zona.

En plena Guerra Fría, en 1971, la Unión Soviética estaba convencida de que más temprano que tarde se iba a producir un conflicto con las potencias occidentales por el petróleo y para ganar tiempo decidieron lanzarse en una búsqueda por su extenso territorio para encontrar depósitos de hidrocarburos de los que no tuvieran información previa. De esa forma llegaron al vasto desierto de Karakum (actual Turkmenistán). Los expertos soviéticos comenzaron una serie de explosiones programadas para evaluar el potencial de la zona.

Para descubrir el potencial, los expertos dinamitaron unas cuevas poco profundas que daban acceso a un depósito de gas natural, según sus análisis. Lo que no se imaginaban los especialistas es que de esta manera iban a encender un problema que iba a continuar 50 años después. La explosión destruyó por completo la estructura, hundiendo el terreno y llevándose consigo todo el equipamiento que los geólogos soviéticos habían desplegado.

Sin víctimas fatales, la explosión hizo que los especialistas se preguntaran si el cráter que habían formado ponía en peligro a todos por una fuga masiva de gas. Ante una posibilidad incierta tomaron una decisión, que a la luz de los hechos terminó siendo otro error. Eligieron prender fuego el agujero de 70 metros de diámetro y 30 metros de profundidad, pensando en que a los pocos días las llamas se extinguirían y el problema estaría resuelto.

50 años después todavía se puede afirmar que los geólogos soviéticos cometieron un error, ya que las llamas nunca se apagaron y lograron abrir la "puerta del infierno", un incendio que sigue ardiendo y que alcanza temperaturas de hasta 400 grados centígrados. Hasta el momento, ningún científico logró vislumbrar ni confirmar cuándo es que finalmente se apagará el fuego, que obviamente se transformó en una atracción turística. Por una cuestión de seguridad, se decidió que los 300 habitantes de la cercana aldea de Darvaza fueran reubicados.