L-Gante está una vez más en el centro de la polémica. A los idas y vueltas con su pareja Tamara Báez le sumó un nuevo conflicto alrededor de sus recitales. Uno de sus próximos shows que iba a realizarse en Santa Cruz tuvo que suspenderse por los "caprichos" que pidió el cantante de cumbia 420, según informaron desde la organización.
"Los caprichos iban desde luces especiales y elementos de escenografía que acá en la Patagonia son imposibles de conseguir", contaron. Elian Valenzuela iba a realizar su show el 5 de febrero en la localidad de Las Heras, Santa Cruz pero, según detallaron desde la organización, en el programa Vamos que venimos, el representante del artista les pasó una lista de pedidos con algunos pedidos particulares.
Además, como en la ciudad no había un hotel acorde a lo pedido, la producción de L-Gante pidió que fuera alojado en un hotel de Comodoro Rivadavia, a casi 2 mil kilómetros de donde tenía que tocar. Según reveló la revista Pronto, el cantante pidió un avión privado para él y todo su equipo.
Pero no es la primera vez que acusan al cantante por sus insólitos pedidos. Hace poco debía hacer su espectáculo en Venado Tuerto pero lo cancelaron y los organizadores publicaron una lista que incluía una PlayStation 5 y un televisor gigante, entre otras cosas.
L-Gante sorprendió a sus fans con una revelación inesperada: "Ya falta poco"
L-Gante suele compartir a través de las redes sociales todos los logros personales que va consiguiendo junto a su familia, su pareja Tamara Báez y su hija Jamaica. Esta vez, sorprendió a sus fanáticos con una noticia que había adelantado meses atrás: logró cumplir otra de sus metas más grandes.
Durante estas últimas semanas surgieron rumores de una crisis matrimonial entre L-Gante y Tamara. Sin embargo, ahora se mostraron unidos una vez más en este nuevo proyecto que están construyendo juntos como familia.
Así, el artista se tomó una pausa de su trabajo con la música para poner manos a la obra y cumplir su sueño de construirse una casa propia en su barrio, completamente por su cuenta. “Yo estoy construyendo. No tengo nada, ni sé qué voy a poner acá. Tengo mi cama y nada más. Estamos empezando de cero”, había adelantado algunos días atrás en diálogo con El club de las divorciadas en agosto de 2021 al comenzar el proyecto.