Migue Granados se cansó de los comentarios ofensivos y dijo basta. El cómico explotó en vivo, durante la transmisión de su programa Soné que volaba, y le respondió a los seguidores que criticaban a sus invitados.
El "hateo" suele estar a la orden del día, y a nivel mediático se hace aún más profundo con personas famosas. Algo de esto sucedió en el programa estrella del canal de streaming Olga, pero el conductor puso un freno a las insólitas críticas, mostró su molestia como nunca lo había hecho y paró los comentarios fuera de lugar.
El fuerte enojo de Migue Granados con sus seguidores
Sobre el final del programa, que tuvo como invitada a Nacha Guevara, el rosarino se detuvo para no dejar pasar una situación que lo disgustó. “No quiero exponer siempre el tema del chat, pero hay gente que no, me parece que... Pasó lo mismo en Cartuchos, por eso se cerró el chat”, comenzó diciendo, mientras relacionaba lo sucedido con su anterior experiencia en Vorterix.
Aunque intentó bajar un cambio, continuó con su exposición sobre el tema: "Estamos haciendo una nota con alguien que quisimos que venga, alguien muy importante, que se tuvo que organizar, que es muy sabia, que tiene sus opiniones políticas, no políticas... cualquiera tiene opiniones políticas... a ver los que están convencidos de lo que dicen, no lo están diciendo con maldad. Simplemente son posturas y demás”.
Si bien hasta ese momento no había dado mayores detalles, luego explicó a qué se debía su enojo: "Siempre están en el chat justamente los más ruidosos, los del último banco, los que tiran borradores, haciendo comentarios. La voz, la edad, a quién se parece... Creo que nos están meando. Y no es solamente cerrar el chat, yo no quiero que nos escuchen. Quiero que vayan a escuchar otro programa”.
Granados hizo referencia a los usuarios que dejan mensajes de odio en el chat que el programa ofrece a sus seguidores, que en esa oportunidad criticaron a Nacha por sus comentarios. "No me importa a mí el número (seguidores en el chat). Quiero que sepan que los desprecio, que no los quiero, no quiero que escuchen mi programa. Vayan a escuchar otra cosa, amigo”.
Luego, el exparticipante de Peligro Sin Codificar explicó que "el objetivo del programa es construir una comunidad de escucha en la que ambas partes, los espectadores y los conductores, puedan beneficiarse", señaló que buscan "la evolución y mejora constantes", y reveló: "Queremos ser felices. Charlar con una mina, mirarla a la cara y que me atraviese una banda. Una mina de 82 años. Quiero que el chat nos nutra, que sean buenas preguntas, que hablen sobre las canciones, pero la gilada no la queremos. No escuchen más Olga. Gracias, corta”.
Para finalizar, su compañero, amigo y co-conductor, Lucas Fridman, intentó bajar los decibeles a la tensa situación y finalizó con un mensaje armonizador: "¿Podemos establecer como una regla ética que mejoren, de que antes de que escriban cualquier pelotudez porque es gratis y porque están al pedo lo piensen dos veces?”.