El cantautor Abel Pintos abrió su corazón en una entrevista íntima y confesó cómo la soberbia le afectó sus relaciones familiares. "Me llevó mucho tiempo comprender ciertas cosas", confesó el artista popular que se presentará en el Teatro Ópera durante el mes de mayo.
“Realmente todo lo que hemos revisado con mis padres y seguiremos revisando no es más que un ejercicio emocional en pos del crecimiento (...) El perdón no es una moneda. Pedir perdón es invitar a hacer un proceso juntos. Y aceptarlo o recibirlo es, también, la posibilidad de despertar muchas otras tantas cosas. Haber arrancado desde tan chico con esta independencia de principios, haber visto que los propios sueños que había estado buscando y todos esos caminos que tomaba crecían, hace que uno empiece a sentirse poderoso. Y eso desarrolló en mí la soberbia lógica”, precisó Abel, entrevistado por Sebastián Soldano (Infobae).
Sobre las consecuencias que le trajo ser soberbio, el cantante señaló: “Perdés de vista que a veces hay que funcionar como eslabón de una cadena de sucesos. Y que dejar de actuar en consecuencia con otros, y no solo por el bien individual, no es perder libertad. La madurez es buena maestra. Me llevó mucho tiempo comprender ciertas cosas. Pero revisando me di cuenta de que había sido egoísta con mis padres en muchos momentos. Y les pedí perdón por eso”.
La reconstrucción espiritual de Abel Pintos: "Estoy conectado con el Sagrado Corazón de Jesús"
El camino del perdón llevó a Abel Pintos a reforzar su costado espiritual. Sobre esto, profundizó: “Desde mi fe estoy conectado con el Sagrado Corazón de Jesús, una imagen que llamó mi atención y me acompañó de cerca desde muy niño. Fui educado en el catolicismo, pero de ese contexto religioso tomé y utilicé toda esa cantidad de datos que pudo darme sobre la vida de Jesús, como el hombre que transitó una porción de la historia”.
"Me gusta investigar sobre la materia. He leído mucho, desde Deepak Chopra a Eckhart Tolle. Lo que más interesante me resulta es la experiencia de ese ser humano en el viaje que transita. Eso que ha tomado del camino. El ejercicio que propone: ´Mirá, esto me funcionó´, sin perder de vista que, al final de cuento, nada es una verdad absoluta. Mi trabajo espiritual en realidad consiste en lograr estar consciente de todo lo que vivo, lo que hago, y hasta de lo que digo”, cerró, en la larga entrevista que repasa aspectos de su trayectoria.