La reconocida conductora Susana Giménez sigue internada luego de dar positivo de COVID-19 hace más de una semana. Se encuentra ingresada en el Sanatorio Cantegril de Punta del Este, en una sala de terapia intermedia. Si bien su estado no es complejo, frente a un cuadro de insuficiencia respiratoria determinaron internarla y así seguir su estado de cerca. En el último parte médico se destaca que está "estable" y "evolucionando favorablemente".
Fue la secretaria personal de la diva, Dolores Mayol, quien informó: "Susana continúa evolucionando favorablemente. Cada día mejor, con menor apoyo respiratorio. De muy buen ánimo, sin complicaciones y con todos los parámetros en mejoría". Recordemos que la conductora de 77 años ya cuenta con ambas dosis de la vacuna Pfizer, ambas aplicadas en Uruguay donde reside desde el mes de mayo del 2020.
Susana comenzó con algunos síntomas, compatibles con el coronavirus, el pasado sábado 5 de junio luego de aplicarse la segunda dosis de la vacuna estadounidense. Allí se conoció que fue contacto estrecho con una persona contagiada y decidió hisoparse: tanto su prueba diagnóstica como la de su hija, Mercedes Sarrabayrouse, dieron positivo. "Tengo un dolor horrible, no puedo hablar", manifestó hace un tiempo en diálogo con Luis Novaresio.
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Cabe destacar que la conductora fue ingresada para recibir una mejor asistencia de los especialistas y fue trasladada a terapia intermedia para estabilizar el oxígeno. "Hasta ahora, todo lo que se está haciendo se ubica del cuadro esperable de la enfermedad", explicó Mayol. Poco a poco, con el paso de los días y el tratamiento, se comenzó a notar la mejora en su estado de salud. Cuando sea dada de alta, comenzará con la lógica rehabilitación.
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