No son horas fáciles para Adriana Aguirre. La vedette sufrió un duro accidente en una obra de teatro que integraba y quedó con fuertes dolores corporales que le impiden seguir su carrera con normalidad. Y en diálogo con La Nación, la protagonista reveló el drama que atraviesa y la falta de respuestas por parte de las autoridades del teatro.
"He pagado todo de mi bolsillo. La intervención quirúrgica de glúteos duró tres horas y media en La Providencia y me operó el doctor Alberto Ferriols, que es especialista en cirugía reconstructiva y reparadora. He firmado un papel para él y para el sanatorio que decía que el motivo era un accidente. Porque, además, Ferriols es médico legista y reconoce lo que es un accidente de lo que no lo es", comenzó diciendo Adriana Aguirre.
Por otro lado, la protagonista dio detalles de su situación física: "Tengo accidentados los glúteos y la rodilla en su parte externa y en la pantorrilla. Tengo coágulos pegados al músculo y es muy doloroso. Esto puede generar una trombosis, y ya hice 20 sesiones de kinesiología para destruir ese coágulo y que, por lo menos, quede un hematoma sangrante que el cuerpo puede reabsorber mejor. Es una cuestión de largo tiempo. No puedo trabajar porque lo hago con mi cuerpo".
Adriana Aguirre denunció que no obtuvo respuestas desde el teatro
"El traumatólogo me dijo que por un tiempo muy largo las dos piernas no iban estar iguales. ¿Sabés lo que es eso para una vedette? Me arruinaron la vida. Es gravísimo que no me queden las pantorrillas iguales. Lo mismo con el glúteo derecho que sangraba y se mezcló con el liquido inflamatorio y produjo coágulos, por lo cual tuvieron que abrir, hacer una toilette quirúrgica y aspirar", relató Aguirro.
Al tiempo que detalló: "Yo estaba boca abajo, con anestesia total, intubada para poder respirar. Lo que estoy pasando no se lo deseo a nadie. Por eso también le reclamo a los dueños del Teatro de la Campana, Eduardo Leitao y Rubén Costoia, porque son socios solidarios de Torry Palenzuela".
Respecto a la falta de respuestas por parte de los empleadores, Aguirre sentenció: "No me han contestado. Recibo las cartas documento de vuelta. Deben hacerse cargo de esta situación y solucionarme el problema. Por ley tienen que tener una aseguradora y contratos en blanco. La situación actual es penosa. En este momento mi psicólogo, Rubén García, me está asistiendo porque estoy muy desestabilizada. Soy una mujer que nunca paró de trabajar y ahora me veo impedida de hacerlo, por mi cuerpo. El teatro va a volver a abrir sus puertas y cómo hago yo para subir al escenario. No es nada fácil. La rehabilitación va a durar unos cuantos meses".