Damián de Santo fue uno de los cientos que pusieron el cuerpo para detener los feroces incendios en Córdoba; en su caso ante la posible pérdida de su complejo de cabañas. El compromiso inicial se vio opacado por una denuncia que lo señaló como presunto usurpador de terreno cordobés. Ante el reclamo que devino en escándalo, salió a aclarar su situación. "Estoy en juicio por eso", sentenció.
La denuncia proviene de la familia Berubi, que reclama desde el 2009 la propiedad de los lotes que de Santo tiene en su poder. Sobre el tema la doctora Mónica Chain, representante legal de los demandantes, aseveró en diálogo con la prensa: "La familia siguió pagando los impuestos y en los 90, De Santo ocupó esos terrenos pero sin verificar que esos terrenos tenían dueño",
"Esas tierras están siendo aprovechadas económicamente y la familia se ve privada de disfrutar o disponer de esos lotes durante mucho tiempo. El juicio comenzó en 2014 pero la ocupación se detectó en 2008. En 2009 se envió un aviso al señor De Santo, para informarle que había dueños en esas tierras pero no fueron oídos", agregó la mujer que busca resolver este conflicto de ocupación ilegítima.
La respuesta de Damián de Santo
El escándalo trascendió la intimidad del actor, viéndose obligado a salir a dar respuestas para que la denuncia por usurpación de tierras no ensucie su carrera. Consultado por un equipo de periodista de TN, de Santo manifestó: "Estamos en un juicio y por eso no puedo decir nada, ni dar opiniones. Todo lo que yo diga en este caso, no suma porque se podría desvirtuar todo".
Escueto en su declaración, indicó: "Lo único que les puedo asegurar es que no soy un usurpador. No hago las cosas por izquierda jamás, pero el tema se va a tener que definir en la justicia. Por más que se hable mal de mi en los medios, todavía no hubo una decisión judicial".
La representante legal de la familia reconoció que del lado de Damián de Santo hubo un interés en negociar un acuerdo que favorezca a ambas partes, lo que podría indicar un reconocimiento de su presunto error. "Las propuestas económicas no fueron satisfactorias porque el monto ofrecido no coincide con el valor del terreno ni con la renta que se le saca a la explotación de las cabañas", estipuló la especialista.