El asteroide 18 Melpomene, que fue descubierto en 1852, pasará a tan solo 1,45 unidades astronómicas (la distancia que separa a la Tierra del Sol) de nuestro planeta y en dirección a la constelación de Cáncer, será visible durante gran parte de la madrugada en el hemisferio Norte, según el portal In-the-sky.org
Una de sus características del asteroide es que su diámetro supera los 140 kilómetros. Por el momento, no está calificado como “potencialmente peligroso”, según la NASA, por lo que su cercanía con el planeta no es considerada de riesgo.
El cuerpo celeste alcanzará su punto más elevado en el cielo a 61º del horizonte sur. Aproximadamente al mismo tiempo que alcance este punto, coincidirá con su momento de mayor cercanía a la Tierra (el perigeo) en los 1.270 días que tarda en completar una órbita completa alrededor del Sol.
¿Por qué Melpomene?
Este asteroide 18 fue descubierto en junio de 1852 por el científico John Russell Hind, quien lo vio en el cinturón de asteroides y lo bautizó como Melpomene, un nombre de origen mitológico. Se trata de la musa griega del teatro, hija de Zeús y Mnemósine.
Lamentablemente, ventajas o desventajas meteorológicas mediante, este fenómeno sin dudas está siendo mejor apreciado desde el hemisferio Norte, pero los que estamos de este lado del planeta muy pronto tendremos revancha.
Próximos eventos
En febrero, los acontecimientos celestes estarán a la orden del día puesto que, tras el paso de este asteroide, podremos presenciar varios fenómenos a lo largo del mes. El siguiente será el próximo 5 de febrero, cuando podrá observarse el cúmulo abierto de estrellas NGC 2264, también conocido como el ‘Cúmulo Árbol de Navidad’. Este fenómeno será visto durante prácticamente toda la noche en la dirección de la constelación del Unicornio, hacia el este de la esfera celeste.
El 8 de febrero, disfrutaremos de uno de los eventos más esperados del mes: la lluvia de meteoritos de las Centáuridas. Si bien está activa desde el 28 de enero, será el día 8 de este mes cuando alcance su mayor actividad, especialmente hacia el amanecer, mirando hacia el sur.
Por último, el mes se cerrará con la Luna de Nieve, que podrá apreciarse durante la noche del 27 de febrero. Recibe este nombre porque ocurre durante el pico de la temporada de nieve en el hemisferio norte.