La ciencia no pierde la esperanza, más allá del escepticismo natural que genera el tema, de encontrar vida en algún rincón del universo. Y para este propósito, la NASA misma invierte dinero.
Aunque programas como SETI han estado centrados en ese rol, esta vez la NASA quiere entregar una nueva chance para hacer historia y para eso entregó más financiamiento para conseguirlo.
Adam Frank, profesor de física y astronomía en la Universidad de Rochester, recibió una beca de la NASA que le permitirá comenzar a responder estas preguntas. La subvención financiará su estudio de firmas tecnológicas, signos detectables de tecnología pasada o presente utilizada en otros planetas. Esta es la primera subvención de firma tecnológica no radiofónica de la NASA otorgada y representa una nueva y emocionante dirección para la búsqueda de inteligencia extraterrestre (SETI) .
“SETI siempre se ha enfrentado al desafío de averiguar dónde mirar”, dice Frank. “¿A qué estrellas apuntas tu telescopio y buscas señales? Ahora sabemos dónde mirar. Tenemos miles de exoplanetas, incluidos los planetas en la zona habitable donde se puede formar la vida. El juego ha cambiado”, comentó el investigador.