Argentina se convertirá en uno de los lugares en donde podrá observase "el cometa del siglo", uno de los cuerpos celestes más importantes de los últimos años. Este suceso marcará un antes y un después en la astronomía internacional y podrá verse desde varios puntos del país y en otros países aledaños.
El cometa C/2023 A3 se podrá ver en el Hemisferio Sur a partir de octubre de 2024. Este evento astronómico promete iluminar el cielo nocturno, alcanzando su mayor brillo entre el 13 y 15 de ese mes. Para observarlo, es fundamental evitar la contaminación lumínica, lo que significa alejarse de las grandes ciudades y buscar cielos despejados en áreas rurales.
Aunque el cometa será visible a simple vista, el uso de binoculares o telescopios mejorará la experiencia, revelando más detalles del fenómeno. Además, las fases lunares también juegan un papel importante, ya que una luna llena podría interferir con la observación. Lo ideal es elegir noches en las que la luz de la luna sea mínima.
Este evento es uno de los más esperados del año por la comunidad astronómica. El C/2023 A3 ha sido catalogado como uno de los cometas más brillantes que se podrán observar en las próximas décadas, convirtiéndose en una oportunidad única tanto para profesionales como para aficionados de la astronomía.
¿Cuál es la temperatura de los planetas del Sistema Solar?
El Sistema Solar está compuesto por ocho planetas, cada uno con características únicas, incluyendo las temperaturas que experimentan en su superficie y atmósfera. Estos valores dependen, principalmente, de la distancia de cada planeta con respecto al Sol, cuya temperatura supera los 15.000.000 ºC. A medida que los planetas se alejan de esta estrella, las temperaturas varían considerablemente, desde extremos de calor hasta fríos intensos.
Mercurio, el planeta más cercano al Sol, presenta grandes oscilaciones en sus temperaturas. Al estar tan próximo a la fuente de calor del Sistema Solar, este planeta puede alcanzar máximas de 427 ºC. Sin embargo, debido a su falta de una atmósfera que retenga el calor, Mercurio también experimenta temperaturas extremadamente bajas durante la noche, llegando a mínimas de -183 ºC. La temperatura media de Mercurio se sitúa en unos 166 ºC, lo que lo convierte en un planeta con condiciones climáticas extremas.
Por otro lado, Venus, a pesar de estar más alejado del Sol que Mercurio, es el planeta más caliente del Sistema Solar. Esto se debe a su densa atmósfera compuesta principalmente de dióxido de carbono, que produce un fuerte efecto invernadero. Las temperaturas en Venus pueden alcanzar hasta 499 ºC, aunque en algunos momentos descienden a mínimas de -45 ºC. La temperatura media de este planeta se mantiene en unos abrasadores 463 ºC, haciendo que su superficie sea prácticamente inhabitable.
La Tierra, siendo el tercer planeta en distancia al Sol, tiene una temperatura mucho más moderada en comparación con sus vecinos más cercanos. Las temperaturas varían considerablemente en función de la región y la época del año, pero en general, el planeta se mantiene dentro de un rango que permite la vida tal como se conoce.
Marte, conocido como el "planeta rojo", tiene un clima que recuerda en ciertos aspectos a los puntos más fríos de la Tierra. La temperatura mínima registrada en Marte es de -87 ºC, similar a las temperaturas de las zonas polares de la Tierra. No obstante, Marte también puede experimentar temperaturas más suaves, alcanzando máximas de 20 ºC, aunque su media se mantiene en torno a los -46 ºC. Estas condiciones hacen que Marte sea uno de los planetas con mayor potencial para la futura exploración y colonización.
Al alejarnos más del Sol, las temperaturas en los planetas gigantes gaseosos como Júpiter y Saturno empiezan a bajar drásticamente. En el caso de Júpiter, la temperatura máxima registrada es de -75 ºC, mientras que la media ronda los -121 ºC y las mínimas pueden descender hasta los -163 ºC. Estas condiciones hacen que Júpiter sea un planeta inhóspito, pero fascinante desde el punto de vista científico.
Saturno, por su parte, muestra una situación similar, con temperaturas que van desde los -73 ºC de máxima hasta los -191 ºC de mínima, y una media de -130 ºC. La composición gaseosa de Saturno y su lejanía del Sol contribuyen a estos valores extremadamente bajos, que se suman a su característica prominente: sus anillos.