Sólido, líquido, gaseoso, plasma y condensado de Bose-Einstein (BEC, por sus siglas en inglés) son los cinco estados de la materia, o al menos los primeros de la lista, pues la ciencia experimenta con otras exóticas formas. Los tres primeros se enseñan en primaria, el cuarto puede que nos suene, y el quinto es el protagonista de un hallazgo científico sin precedentes.
Los científicos han observado el quinto estado de la materia en el espacio por primera vez, ofreciendo una visión que podría ayudar a resolver algunos de los misterios más intratables del universo cuántico, según mostró una investigación de la Estación Espacial Internacional (EEI) publicada este jueves.
Los condensados de Bose-Einstein (BEC), cuya existencia fue predicha por Albert Einstein y el matemático indio Satyendra Nath Bose hace casi un siglo, se forman cuando los átomos de ciertos elementos se enfrían hasta casi el cero absoluto (0 Kelvin, menos 273.15 Celsius).
En este punto, los átomos se convierten en una entidad única con propiedades cuánticas, en donde cada partícula también funciona como una onda de materia. Los BEC se extienden a horcajadas en la línea entre el mundo macroscópico gobernado por fuerzas como la gravedad y el plano microscópico, regidos por la mecánica cuántica.
Los científicos creen que los BEC contienen pistas calves sobre fenómenos misteriosos como la energía oscura, la energía desconocida que se cree que está detrás de la expansión acelerada del Universo.
El jueves, un equipo de científicos de la NASA dio a conocer los primeros resultados de los experimentos de BEC a bordo de la Estación Espacial Internacional, donde las partículas se pueden manipular sin restricciones terrestres. El Cold Atom Laboratory (CAL) se lanzó a la ISS en 2018. Este dispositivo del tamaño de una maleta enfría átomos de rubidio y potasio en una cámara de vacío, utilizando luz láser para ralentizar su movimiento.