A finales del siglo XVIII, Carmen de Areco era un fortín, como otros en la región de Lobos y Navarro. Estos fortines, junto con los cercanos de Chascomús, Luján y Monte, constituían la frontera bonaerense de aquel entonces. Carmen de Areco, que incluía las ciudades de San Antonio de Areco y Carmen de Areco, estaba administrativamente bajo el Partido de Luján. Estos fortines funcionaban como puestos de vigilancia para alertar en caso de ataques indígenas, y formaban parte de la historia temprana de la provincia de Buenos Aires.
Con los años se convirtió en una localidad especial para visitar por su riqueza arquitectónica y sus calles cargadas de historia. Te contamos qué hacer y cómo llegar a Carmen de Areco para tener una escapada completamente maravillosa.
Un viaje a la tradición y la historia
En 1812, se fundó el Partido de Carmen de Areco, un pueblo en la Pampa Argentina que se distingue por su compromiso en la conservación de sus tradiciones y costumbres. Este encantador rincón queda en el partido de Carmen de Areco, en la provincia de Buenos Aires, a solo 147 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires. Para aquellos que visitan la ciudad durante unos días, y se alojan en hoteles del centro, alquilar un auto es una excelente opción para explorar la belleza rural argentina.
Cómo llegar a Carmen de Areco desde Buenos Aires
Desde el icónico Obelisco de Buenos Aires, el punto central de la ciudad, es fácil llegar a Carmen de Areco. Simplemente seguí la Avenida 9 de Julio hasta encontrar la Autopista 25 de Mayo. Luego, conectá con el Acceso Oeste en dirección a la RN7 en La Reja. Continua por la Ruta 7 o la Autopista Luján hasta llegar a tu destino. En total, son 147 kilómetros, y si las condiciones del tráfico son favorables, podés llegar en menos de dos horas.
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Qué hacer en Carmen de Areco
El encanto de la Estación de trenes
Uno de los lugares de visita imprescindible en Carmen de Areco es la antigua estación de trenes. Esta estación pertenecía al Ferrocarril General Urquiza, aunque lamentablemente dejó de prestar servicios en la década de 1990. Hoy en día, se utiliza como terminal de ómnibus y alberga el destacamento de la policía local.
Construida en 1880, la estación combina características de las estaciones inglesas y francesas de la época. Su estructura incluye espacio para la balanza y las encomiendas, boletería, sala de máquinas, sala de comunicaciones (inicialmente telégrafo y luego teléfonos), sala de espera y áreas para el personal. Además, en el recinto se encuentran dos galpones de gran tamaño que solían utilizarse para la reparación de maquinaria y el almacenamiento de cereales y otros objetos. Junto a la estación se encuentra un tanque que servía para enfriar y abastecer de agua a las locomotoras.
Aunque el tren dejó de funcionar en 1993, bajo la triste consigna de "Ramal que para, Ramal que cierra", los habitantes de Carmen de Areco mantienen la esperanza de que algún día el ferrocarril regrese a su comunidad. Existe incluso un proyecto para transformar la estación en un espacio cultural que preservará su legado histórico.
El centro histórico de Carmen de Areco
Una parada obligada en Carmen de Areco es la plaza y la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen. La construcción de esta iglesia comenzó en 1858 y ha experimentado mejoras a lo largo de los años, gracias al apoyo de los habitantes locales. Inicialmente, la iglesia tenía dos patronos, San Agustín y San Esteban, pero finalmente, la población eligió a la Virgen del Carmen como su patrona, lo que la convierte en un lugar de profundo significado religioso y cultural.