Luego de que se viralizara el video de ella robando en un shopping, Verónica Monti reconoció su enfermedad llamada cleptomanía y detalló cómo la sociedad de burla de las personas que la sufren, como le pasó en las redes sociales.
La expareja de Sergio Denis declaró en Nosotros a la Mañana (El Trece): “Por lo que pasó no me siento bien, no estoy bien. Las pocas energías que tengo para caminar por la vida... Si me pongo a responder a cada perejil al cuadrado algo que no es porque desconoce lo que es la cleptomanía, pierdo el tiempo y pierdo las pocas energías que tengo”.
“Es un momento sumamente difícil, son años sumamente complicados, en algún momento esto iba a suceder, iba a pasar. La cleptomanía es un robo, pero no. La conducta de la persona cleptómana no es la de un robo tradicional, donde salen corriendo disparados, donde son siempre dos...", profundizó la protagonista que padeció el escarnio público en los últimos días.
Y describió a aquellos que tienen su mismo problema de salud: "El cleptómano se maneja siempre solo, tiene siempre un deseo irrefrenable de agarrar un objeto, y después de tenerlo le genera una angustia completa que hace que lo termine regalando o tirándolo”.
Verónica Monti aprovechó para explicar de qué se trata esta patología: “Es una enfermedad poco común, afecta en líneas generales a las mujeres y aparentemente no tiene cura. No se sabe si es algo genético, pero sí con la medicación adecuada, que yo en su momento tomé, que es una droga de epilépticos. Muchas de estas drogas son anti compulsivos, y las personas que sufrimos esta enfermedad somos compulsivas".
Ante las preguntas del conductor Joaquín "Pollo" Álvarez y del resto del panel del programa, se sinceró: "Tuve que dejar de tomarlo porque tenía efectos colaterales que rebotaban en mi organismo, pero es una enfermedad de la poco se sabe, de la que la gente se ríe y te dice ‘chorra’ o ‘mechera’, pero la realidad pasa por otro lado”.
“Es algo irrefrenable, no lo podés controlar, es una sensación rara porque cuando ya lo tenés, al poco tiempo querés deshacerte del objeto, es así. Uno funciona automáticamente: cuando suena la alarma no discutís, no peleás, pedís disculpas. Son cosas que no hace el ladrón normal, esto es una enfermedad. En los videos se ve, yo vuelvo con cara de… No sé, me parece que no hay que confundir”, añadió Monti.
Y, para cerrar, reveló hace cuánto que tiene este serio inconveniente: “Desde los 25 años, ahora tengo 42… 17 años ya. Obviamente hay niveles, como en cualquier enfermedad hay niveles bajos, medios y altos. En mi caso son hechos aislados y esporádicos en el tiempo. Hay personas que se despiertan con un deseo irrefrenable por robar en un lugar público, él sabe que va a ser visto… Hace todo al revés a lo de un ladrón normal. En mi caso son hechos aislados y esporádicos, y siempre me deshice de las cosas que sustraje”.