"Lo hablamos y lo aceptó", la confesión del Turco García a su pareja

La revelación que el Turco García le hizo a su esposa. El ex participante de MasterChef y un duro momento que tuvo que atravesar. 

13 de diciembre, 2020 | 12.55

Claudio El Turco García es uno de los participantes que el público más quería de MasterChef Celebrity. Pese a que logró sobrepasar diferentes instancias del reality de Telefe, los miembros del jurado Donato De Santis, Germán Martitegui y Damián Betular decidieron prescindir de él. Sin embargo, el exfutbolista cumplió con su objetivo: lograr que la gente lo conozca un poco más. Curiosamente, en las últimas horas y en una entrevista que le concedió a Robertito Funes Ugarte, realizó una confesión íntima que tiene que ver con su pareja: contó en detalle cómo fue le blanqueó que tenía otro hijo.

Todavía dolido por la inesperada muerte de su querido amigo Diego Maradona, el Turco abrió su corazón y resaltó que MasterChef y la Academia, club en el que brilló, le cambiaron la vida: "Yo estaba bajo tierra: con la adicción estaba para morirme. Me recuperé en 2008 gracias a mi señora. Racing me da la posibilidad de laburar en el club. Y Masterchef me cayó del cielo".

Consultado por su vida privada, el Turco se animó a explicar cómo fue aquella charla en la que le explicó a su pareja Mariela que tenía un hijo con otra persona. "¿Cuántos nietos tenés, Turco?", le consultó Robertito a García. Y este respondió: "Tengo seis hijos y siete nietos. Cuatro son con la primera esposa, uno con Mariela (Prietto, su actual pareja) y otro nene más que se llama Rafael".

Con un poco de timidez, el ex futbolista de la Selección Argentina aclaró: "Bueno... Mi señora... Eh... Lo hablamos y lo aceptó a mi hijo Rafael. Mariela, una crack. Lo aceptó como uno más de la familia. La verdad que chapeau".

 

El mal momento del Turco García por la muerte de Maradona:

En diálogo con TyC Sports, el Turco Gacía se refirió a la muerte de Diego Maradona y culpó al entorno que lo rodeaba: "No fue cuidado. Hace diez años que no podemos verlo. Los compañeros de la vieja guardia, los compañeros de la Selección Argentina en el '86 y yo no podíamos verlo. Para mí, Diego estaba secuestrado. Tenía más filtros que para ir a ver a Mick Jagger o al presidente de Estados Unidos", apuntó.

Y disparó: "Que den la cara los que estuvieron al lado de él. En el velorio, no vi a ninguno de ellos. Él dormía en un playroom. Si ven la casa en la que estaba él, se mueren. Cualquiera en Argentina o el mundo, le hubiera dado una casa para que pueda hacer dignamente un tratamiento. No había ninguna ambulancia, ningún desfibrilador. En las internaciones domiciliarias, siempre tenía una ambulancia a disposición. El baño de la casa en la que estaba parecía un baño ecológico, por lo que me dicen...".