Durante la noche del domingo 15 de mayo y en la madrugada de este lunes 16 se pudo apreciar un fabuloso fenómeno natural. Se trata del eclipse lunar, un evento astronómico en el que la luna se tiñó de color rojo y que pudo ser vista por millones de personas de todo el planeta.
A las 22.30 horas de la jornada de ayer, la Luna se fue oscureciendo de manera lenta y dicho proceso pudo ser apreciado desde diversos países de América del Sur, América Central, gran parte de América del Norte, Europa Sur, Europa Oeste, África, Asia Sur, Asia Oeste y la Antártida.
Durante casi una hora y media, el eclipse lunar comenzó a presentar diversos cambios en sus formas y colores. El mismo pasó de ser anaranjado a rojizo y tuvo una duración de aproximadamente 5 horas y 19 minutos: culminó a las 5.30 horas de la madrugada. El Sol, la Tierra y la Luna se alinearon en el cielo, por lo que se produjo la "Luna de sangre" o "Luna roja", un evento que no se repetirá hasta dentro de cuatro años, de acuerdo a lo que advirtieron los expertos.
Qué es un eclipse lunar
La Luna orbita la Tierra aproximadamente una vez cada 29 días y medio. Mientras gira alrededor del planeta, su posición cambiante con respecto al Sol, hace que nuestro satélite natural pase por una serie de fases.
Dichas fases son conocidas como luna nueva, creciente, primer cuarto, gibosa creciente, luna llena, gibosa menguante, último cuarto, creciente viejo y otra vez la llamada luna nueva.
Un eclipse lunar ocurre cuando el Sol, la Tierra y el satélite se alinean, a nuestros ojos, en el cielo. Entonces, la Luna atraviesa la sombra de nuestro planeta, que está dividida en dos partes, la central, llamada umbra, y la externa, conocida como penumbra. La luna llena sale al atardecer y es visible durante toda la noche. Al final, se pone justo cuando sale el Sol. Ninguna de las otras fases tiene esta característica única. De acuerdo con la NASA, ocurre porque la Luna está directamente opuesta al sol en el cielo cuando la luna está llena.
Este eclipse sólo puede ocurrir en luna llena, y solo si atravesara alguna porción de la sombra de la Tierra, ya sea la penumbral o exterior, así como la sombra umbral o interior. En este contexto, hay tres tipos básicos de eclipses lunares: el de luna penumbral que atraviesa la sombra exterior, lunar parcial que atraviesa la sombra interior, y total de luna que atraviesa la umbral y tiene un vibrante color rojo.
Por qué la luna se tiñó de rojo en el eclipse lunar
Según lo que indicó Beatriz García -directora del Observatorio Pierre Auger (Argentina)- en diálogo con National Geographic, "lo que ocurre es que La Tierra se posiciona entre el Sol y la Luna, pero por el borde del planeta, la radiación que llega del Sol interactúa". De esta forma, se puede afirmar que la Luna no se tiñe verdaderamente de rojo y que se trata tan sólo de una perspectiva visual.