Un grupo de personas se juntó en la Plaza de Mayo para manifestarse en contra de la cuarentena que establece la Organización Mundial de la Salud para evitar los contagios por coronavirus. Con barbijos, salvo alguna excepción, y con carteles protestaron para que el gobierno deje de enfocarse en el cuidado sanitario y levante la medida de aislamiento social.
En las entrevistas que pudo obtener C5N en el lugar, se repitieron las teorías de la conspiración y posturas antivacunas junto a la idea de que se trata de una "falsa pandemia" y que el virus fue "creado por corruptos". Inclusive una mujer exigió rectificar el camino para seguir las políticas que llevan adelante los gobiernos de Estados Unidos y Brasil, dos de los países con mayor cantidad de muertes por coronavirus del mundo.
En el móvil se acercaron peligrosamente al periodista Lautaro Maislin, sin respetar el distanciamiento social, y hasta una mujer sin barbijo le habló. En tiempos donde se aconseja el distanciamiento, estas actitudes son desaconsejables ya que puede poner en riesgo la salud de las personas ante un posible contagio de coronavirus.
Convocados a través de las redes sociales por movimientos de derecha y ultraliberales, se organizaron para violar el decreto establecido por el gobierno nacional para prevenir la diseminación del COVID-19.
Sin respetar el distanciamiento social ni las medidas básicas de higiene y seguridad, la pequeña manifestación estuvo protagonizada por el pedido de una supuesta "libertad".
"Alberto Fernández está usando al nuevo orden mundial para controlar la soberanía de los países", aseguró un adolescente en el móvil de C5N.