Cuando la plata se pone opaca, los accesorios pueden verse sucios o manchados y es fundamental realizar una limpieza a tiempo. Pero ¿cómo se hace sin dañar la plata? ¿con qué materiales? ¿Es necesario que lo haga un especialista?
Con estos consejos vas a poder tener tus accesorios con el brillo del primer día sin complicaciones.
Cómo limpiar correctamente un aro de plata
Con el paso del tiempo es muy probable que la plata se ponga opaca, por lo que es fundamental realizar el mantenimiento de manera periódica y así evitar tener que hacer un tratamiento más profundo. La forma más fácil de realizar la limpieza periódica es con una solución preparada con agua tibia y un detergente no abrasivo.
Podemos armar la solución en un recipiente y colocar adentro las piezas que querramos limpiar: aros y tuercas deben sumergirse para garantizar una limpieza total. A continuación, luego de dejar reposar los accesorios, frotaremos las piezas con las manos evitando pasarle uñas u otros objetos que puedan dañar la superficie. Con el mismo cuidado secaremos los aros con un paño seco, ejerciendo un poco de presión para lograr el efecto de pulido.
Como limpiar en profundidad un aro de plata
Si no realizamos un mantenimiento habitual y periódico, es probable que necesitemos de una limpieza a fondo de los aros: la suciedad será más difícil de eliminar, pero no imposible.Para realizar esta limpieza necesitarás: bicarbonato de sodio o pasta de dientes, agua, paño o cepillo de cerdas suaves. A continuación te dejamos el paso a paso.
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Prepará una pasta con agua: agregale bicarbonato o pasta de dientes
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Desparrama la pasta por toda la superficie de los aros, tanto en el interior como el exterior
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Una vez colocada la pasta, cepilla o limpia con un paño: este paso debe realizarse con movimientos suaves para no rayar la superficie ni dejar marcas
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Por último secar la pieza con una toalla, con igual cuidado y suavidad que realizamos la limpieza.
Consejos para limpiar aros de plata
Las recomendaciones fundamentales son:
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Evitar el uso de elementos que puedan dañar el metal
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Se sugiere no utilizar guantes de goma para realizar el procedimiento
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Limpiar los aros por separado para evitar el roce
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Una vez limpios, comprobar que se encuentran totalmente secos para evitar la aparición de manchas de humedad, y guardarlos en una bolsa de papel de seda o similares para mejorar su conservación.