Para garantizar la salud de familia, amigas y amigos es necesario mantener unas buenas prácticas al momento de cocinar. Entre ellas, además de mantener limpios utensilios y superficie a utilizar, es muy importante la forma en que se limpian las verduras y las frutas que se utilizan en las recetas.
El Ministerio de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires a través de la Dirección de Industrias y Productos Alimenticios (DIPA) recomienda evitar esperar a tener que usar las frutas y verduras para lavarlas. Antes de guardarlas en la heladera o en un cajón, apenas se regresa de la verdulería es conveniente sanitizarlas.
De esta forma, las frutas y verduras quedan listas para consumir en cualquier momento y se ahorra tiempo al momento de cocinar. Sin embargo, cada fruta y verdura puede tener su particularidad tanto al momento de lavarlas y desinfectarlas como cuando hay que decidir cómo conservarlas para que duren más tiempo sanas.
Paso a paso, cómo lavar correctamente frutas y verduras
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Colocar las verduras y las frutas en la pileta de la cocina.
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Lavar solo con agua una por una, refregando con las manos para retirar la suciedad y restos de tierra.
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Una vez lavadas (SOLO CON AGUA) retirarlas y colocarlas sobre la mesada.
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Hervir agua y enjuagar la pileta, arrojando el agua sobre toda la superficie. Dejar correr hasta que se vacíe.
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Una vez que la pileta esté limpia, colocar un tapón y llenar con agua potable fría ayudándonos con una jarra medidora para saber cuántos litros colocamos.
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Llenar la pileta con agua, a un nivel suficiente para sumergir la fruta y la verdura y calculamos las gotas de lavandina que debemos colocar. Leer atentamente el rótulo, la cantidad de gotas por litro de agua.
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Colocadas las gotas, sumergir los vegetales y dejamos reposar por 10 minutos.
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Finalizado el reposo, retirar las frutas y verduras. Podemos colocarlas sobre un repasador limpio o sobre papel descartable para secarlos, pero no es estrictamente necesario.
Es muy importante que la lavandina utilizada diga en el rótulo "apta para desinfección de agua/alimentos" y evitar usar lavandina en gel, perfumada o con desengrasante. Además, puede ser peligroso usar la lavandina que se compra de a litro porque no cuenta con un rótulo que informe sus condiciones de fabricación y sus niveles de concentración. No hay forma de saber si las mezclas y las diluciones están bien hechas durante la fabricación.
Cuál es la particularidad de lavar y conservar verduras de hojas
Lo complejo de las verduras de hojas es la tierra que se puede acumular entre las diferentes capas que la conforman. Por eso, su desinfección puede volverse tediosa ya que es necesario garantizar la limpieza de todas sus hojas. Además, hay que tener en cuenta cómo conservarlas después para que no se pudran por la humedad.
El secreto para una buena conservación de las verduras de hojas es dejar secar cada hoja con un paño descartable, dejarlas bastante tiempo afuera de la heladera o utilizar el centrifugador para asegurar el secado. Una vez que se garantiza esto, agarrar un contenedor de plástico, colocar un papel absorbente abajo y todas las hojas apiladas sobre él. Se puede poner una servilleta entre cada hoja, pero no es estrictamente necesario.
Llevar el contenedor sin tapa a la heladera y dejar así, destapado, una hora. Pasado ese tiempo, colocar otro paño absorbente sobre la pila de hojas y cerrar el bowl. De esa forma se garantiza la conservación y las verduras de hojas tardan más en pudrirse.