Cuáles son los tres tipos de amigos que hay que tener, según la ciencia

La felicidad es uno de los aspectos más valiosos en la vida y a menudo ocupa un lugar prioritario en las preocupaciones de las personas. Sentirse feliz implica experimentar una sensación de plenitud y tranquilidad a lo largo del día, en cada una de las actividades y responsabilidades que se realizan. Aunque para muchos puede ser complicado lograr un estado constante de alegría, es fundamental rodearse de personas y tener amistades que contribuyan de manera positiva a este sentimiento, ayudando a desarrollarlo y fortalecerlo.

Es por esto que los psicólogos y estudiantes de las relaciones humanas, aseguran que para lograr tener un buen nivel de paz y satisfacción se requiere de un entorno social que acompañe diariamente y que influya de manera significativa en nuestro bienestar emocional.

Recientemente un estudio de la Universidad de Harvard, conocido como el Estudio del Desarrollo Adulto, investigó los diferentes tipos de amistades que las personas establecen a lo largo de su vida y cómo estas repercuten en su felicidad. Partiendo desde la base de que Aristóteles clasificó las amistades en tres categorías, el profesor Arthur Brooks, retomó y amplió estos conceptos.

Cuáles son los tres tipos de amigos que recomiendan que hay que tener 

Según el estudio desarrollado en la Universidad de Harvard por el profesor Athur Brooks, todas las personas deberían tener tres tipos de amistades para poder tener un mayor bienestar en sus vínculos emocionales. Mantener relaciones de calidad en nuestra vida es clave para alcanzar una felicidad plena y duradera, ya que las personas que nos rodean tienen un impacto significativo en nuestra paz interior y bienestar.

Amistades útiles

Este tipo de amistad surge cuando dos personas comparten un objetivo en común, como un compañero de trabajo o alguien que participa en una causa social similar. Esta relación se basa en la colaboración mutua para alcanzar metas compartidas, y aunque puede no haber un lazo emocional profundo, este tipo de vínculo genera un sentido de satisfacción y bienestar, lo que contribuye a la felicidad.

Amistades de placer

Estas relaciones nacen de un disfrute compartido, como un pasatiempo o una actividad recreativa. Son aquellas personas con las que se pasa tiempo libre, ya sea jugando un juego de mesa o saliendo a divertirse. Aunque este tipo de amistad tiene similitudes con las amistades útiles, se distingue por un mayor lazo emocional y el placer mutuo que produce. Estas personas nos ayudan a desconectar de la rutina diaria y a relajarnos, lo que las hace esenciales para mantener un equilibrio mental saludable.

Amistades perfectas

Aristóteles utilizó el término "perfecto" para describir este tipo de amistad, aunque no es en el sentido estricto de la perfección. Estas relaciones se basan en un amor mutuo y profundo que no solo une a las personas, sino que las impulsa a ser mejores. Son amistades que brindan una sensación de seguridad y permanecen fuertes a pesar de los problemas que puedan surgir. Este tipo de vínculo es raro y difícil de encontrar, por lo que es crucial cuidarlo y valorarlo.