La trascendencia que alcanzó Charly García en la cultura argentina gracias a una trayectoria de excelencia de más de 50 años. Por eso, un vecino que vive en el mismo edificio que el músico en Av Coronel Díaz y Av Santa Fe lo homenajeó con un impresionante mural, que también vino con una propuesta para el Gobierno porteño: piden cambiar el nombre de la calle del edificio por Avenida Charly García.
Después de seis meses de trabajo, Tian Firpo y Marcelo Ferrán compartieron en sus redes sociales el impresionante homenaje que realizaron para uno de los músicos argentinos más destacados. En la terraza del edificio ubicado en la esquina de Coronel Díaz y Santa Fe, se asienta el nuevo mural de nueve metros del teclado Oberheim que Charly García usó para grabar Yendo de la cama al living en 1982. Encima del instrumento se ve un pentagrama con notas, que configuran la introducción de la canción que abre el primer álbum solista del artista.
Arriba del mural se puede leer "Av. Charly García", intentando instalar la idea de que Coronel Díaz debería cambiar su nombre por el del notable artista argentino. Según contó el mismo Ferrán, vecino de García, Mecha Íñigo (actual pareja del músico) le reveló que Charly está encantado no solo con el homenaje sino también con la propuesta de cambiar el nombre de la avenida que los cobija. Coronel Díaz recibe su nombre del militar Pedro José Díaz, que fue parte del Ejército de los Andes y estuvo junto a Juan Manuel de Rosas en las guerras civiles.
Claro que la elección de la canción para rendir tributo a García no fue azarosa: el músico compuso esa canción en el mismo departamento del barrio de Palermo donde aún hoy vive. "A Charly hay que homenajearlo en vida", destacó Ferrán en diálogo con Página 12. Cabe recordar que la ley estipula que para homenajear a una persona con el nombre de una calle, el mismo debe llevar 10 años fallecido.
Yendo de la cama al living fue el primer disco solista de Charly García tras la separación de Serú Girán. Este álbum doble está compuesto por temas cantados y otros instrumentales que formaron parte de la banda sonora de Pubis Angelical, una película dirigida por Raúl de la Torre. El disco fue editado en agosto de 1982, contó con la participación de músicos de la talla de Luis Alberto Spinetta, León Gieco, Nito Mestre y Pedro Aznar, y con el correr del tiempo se convirtió en un clásico de la discografía de Charly García y también de la música argentina.