Whatsapp es una de las aplicaciones más utilizadas en todo el mundo, pero así como es tan popular también puede ser espiada. Muchas veces son tus jefes los que se aprovechan de esta situación para vigilarte o también especialistas en el tema, pero hay formas de evitarlo.
Los principales falencias de seguridad pueden ocurrir cuando se utiliza WhatsApp web, donde pueden obtenerse registros de nuestros movimientos. Una forma de combatirlo es con la extensión para Google Chrome "Privacy Extension". Una vez descargado, aparece al lado de nuestra barra de direcciones para poder activarla y desactivarla a nuestro gusto.
Con la extensión activada se ocultan las imágenes y videos que nos llegan para evitar que las vea alguien indeseado. Para observarlas se debe pasar el cursor por encima o darle click al play, en el caso de los videos. También es posible ocultar fotos de perfil, grupos y nombres.
Incluso se pueden hacer borrosas las conversaciones. Una forma es configurarlo desde el menú del programa, para que no se vean los mensajes que estás escribiendo ni las previsualizaciones que se aparecen en la columna de contactos.
Otros métodos seguros son utilizar el modo incógnito del navegador, pero sin olvidarse de borrar los datos del caché DNS. Y por supuesto, nunca te olvides de cerrar la cesión de WhatsApp Web. Si la dejaste abierta y estás lejos de la computadora, siempre podés hacerlo desde la aplicación del celular en la opción dedicada a la extensión.
Además, otros datos simples que pueden ayudarte a cuidar tu información es no olvidar cerrar tu sesión de WhatsApp Web, aunque lo mejor es que no abras sesión en el equipo de las computadoras de la empresa.