Para el próximo lunes 25 de abril de 2022, se espera un extraño fenómeno climático: Argentina experimentará un cambio brusco de temperatura en pleno otoño que comenzará con 40°C, seguido por una posible caída de granizo e incluso la presencia de nieve en las zonas cordilleranas.
Las temperaturas más elevadas afectarán únicamente al norte del país, especialmente Chaco y Formosa, desde el lunes hasta el jueves. En cuanto a Buenos Aires, la temperatura oscilará entre los 10°C y 15°C y a partir del viernes se pronostican “eventos de lluvias y tormentas, que podrán ser fuertes y estar vinculados a abundantes precipitaciones junto con intensas ráfagas y caída de granizo”, según informó la vocera del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Marcela de Diego, en diálogo con Clarín.
Las tormentas se harán más presentes en algunas provincias del sector de la cordillera, como Río Negro, Neuquén, Chubut y Mendoza, probablemente llegarán acompañadas por granizo y nieve. Tanto en el centro como en el norte del país, la temperatura descenderá notoriamente a partir del jueves.
De Diego sostuvo que este “tiempo loco” se debe a “un pasaje de sistemas de baja presión por el sur de la Patagonia que se mantendrá al menos hasta el jueves próximo”. En cuanto a la ola de calor que afectará al norte, explicó que está asociado a la presencia “de un sistema de baja presión que se forma en el Pacífico y que va a permitir la llegada de aire cálido y húmedo desde zonas tropicales”.
Por otra parte, el SMN destacó que el pronóstico de precipitaciones para este trimestre “no es favorable para el noreste de nuestro país, considerando la situación crítica de los últimos meses en Corrientes”. Además, el fenómeno climático de "La Niña", que consiste en una disminución extrema de las precipitaciones, continuará en gran parte del otoño.
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Verano 2022 en Argentina: récord histórico de altas temperaturas y sequías
El verano de 2022 fue el tercer verano más cálido de la historia en Argentina después del de 1989 y el de 2012. En el norte y el centro del país, se registraron temperaturas superiores a los 40°C durante varios días, especialmente en el Litoral, en donde esta ola de calor llegó a durar 14 días.
Con respecto a las precipitaciones, también hubo un récord histórico en cuanto al déficit de lluvias, que trajo como consecuencia una sequía prolongada en el noreste del país. En este sentido, el SMN explicó que “el calor extremo y la escasez de lluvias contribuyeron a incendios devastadores en el norte del Litoral”, particularmente en Corrientes.