Muchos conductores conocen casi al detalle todos los aspectos y funciones de sus autos, sin embargo, 9 de cada 10 pasan por alto un detalle que puede hacer su experiencia al volante mucho más cómoda. Si bien se encuentra en todos los vehículos y es parte del cinturón de
Está claro que los autos y su funcionamiento son una maravilla de la ingeniería que revolucionó la vida del mundo por completo. Con el avance de la tecnología, los vehículos se volvieron más rápidos, más eficientes e incluso más seguros, llegando al punto de incorporar pequeñas mejoras que a veces pasan inadvertidas. En los vehículos de motor de combustión, más de 30.000 componentes se sincronizan, mientras que los eléctricos utilizan alrededor de 10.000. En medio de toda esta complejidad, hay soluciones ingeniosas que mejoran la experiencia de conducción.
Una de las más desconocidas es la pequeña lengüeta en el cinturón de seguridad. El pequeño lazo de tela ubicado en el extremo de la cinta del cinturón, hecho del mismo material, tiene un papel crucial. Cuando no estás usando el cinturón, la lengüeta mantiene el cierre en su lugar, lo que facilita su acceso y evita que golpee contra el pilar del coche. Esto no solo reduce ruidos molestos, sino que también protege el interior del vehículo de posibles daños, e incluso evita que el elemento pueda causar lesiones cuando una persona no utiliza el cinturón.
No obstante, su mayor importancia reside en una medida de seguridad. Es que este bucle se puede descocer ante un fuerte impacto, como puede ser un choque, y otorgar unos centímetros más de tela para que el cinturón de seguridad cumpla su función de proteger la integridad de los pasajeros. Además, esta lengüeta ayuda a que la tela del cinturón no se enrede en el cierre, algo que puede ser incómodo de solucionar. Aunque en algunos coches esta lengüeta ha sido reemplazada por un tope de plástico más económico, su efectividad no es la misma.
Cómo limpiar el aire acondicionado y dejar el auto en óptimas condiciones: el paso a paso
La próxima llegada de la primavera, y por ende el ascenso de las temperaturas, hacen que sea necesario revisar los equipos para garantizar su funcionamiento en épocas de calor. Precisamente, el sistema de aire acondicionado de un vehículo es esencial para asegurar la comodidad en los viajes, pero su mantenimiento suele ser ignorado, lo que puede llevar a problemas de salud y costosas reparaciones.
Con el uso regular, incluso en autos 0 km, el aire acondicionado acumula suciedad, polvo, bacterias y hongos en sus conductos y filtros. Estos contaminantes no solo generan malos olores, sino que también pueden afectar la salud de los pasajeros del vehículo, provocando alergias o problemas respiratorios. Además, un sistema sucio puede perder eficiencia, obligando al motor a trabajar más y, por lo tanto, consumiendo más combustible y enfriando muy poco. Por estas razones, además del service habitual de cada auto, es recomendable realizar una limpieza completa cada seis meses o cada 20,000 kilómetros, lo que ocurra primero.