Dependiendo de la cultura en la que uno se encuentra inmerso, hay determinados objetos que pueden recibir un nombre y generar cierta sorpresa en las demás personas. Este es el caso del limpiador de pisos que para algunos es un haragán pero para otros un palo de piso. Aunque su verdadera nominación puede ser otra totalmente distinta.
La visión que tenemos de la vida se encuentra mediada por la cultura que nos rodea porque es la que termina de formarnos por medio de los conocimientos que vamos recolectando. Esto puede provocar que un simple objeto de limpieza disponga de varios nombres y que cada uno de ellos sean considerados como válidos al mismo tiempo.
"Palo de piso, llórenlo porteños", señaló Marilú, como figura su usuario de X (Ex Twitter). Sin embargo, su posteo comenzó a transformarse en viral porque varias personas le respondieron que se trata de un secador. Aunque para otros es un escurridor. "Acá en Entre Ríos le decimos lampazo", escribió un hombre. Y su respuesta fue respaldada por varios habitantes de Uruguay. "En Catamarca le dicen haragán", agregó una mujer.
Mientras que otros sostienen que debe aplicarse cierta lógica de acuerdo a los beneficios que el objeto entrega. "Secador y palo de piso está bien dicho", comentó un usuario. Por otro lado, varios expresaron que decirle mopa es algo incorrecto porque se trata de un producto distinto y que dispone de una mayor calidad.
Ideal para el verano: el truco que no falla para tener la pileta siempre impecable
La llegada del verano provoca que muchas personas a hacer uso de las piletas en sus hogares pero el proceso de limpieza de las mismas es algo bastante tedioso, debido a que cambiar el agua y limpiar las superficie lleva un tiempo más que considerable. Aunque hay un secreto que permite evitar que se junte tanta mugre y conservar la calidad de la piscina.
El secreto se encuentra en hacer uso de bicarbonato de sodio, ya que permite neutralizar la presencia de malos olores y entrega una protección que es la de desinfectar determinados ambientes. Esto lo vuelve deal para mantener limpia la pileta sin tanto esfuerzo.
Aunque el proceso de colocación es bastante particular. Las personas primero deben medir el pH del agua y se recomienda que los valores oscilen entre 7.2 y 7.6. Cualquier otro resultado es aconsejable vaciar y cambiar. Luego, se debe tirar una taza de bicarbonato pero de acuerdo a la siguiente proporción: una por cada 40 mil litros de agua. Por último, hay que producir una de recirculación del líquido para que el producto se mezcle de manera correcta.
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