Un estudio asegura que el fin del universo podría suceder mucho más pronto de lo que pensábamos. La investigación, a cargo de científicos de la Universidad de Princeton, en Estados Unidos, afirma que hay una fuerza, llamada energía oscura, que se estaría debilitando cada vez más rápido.
De acuerdo con la teoría del Big Bang, el universo se expandió después de estar mucho tiempo en un estado de alta densidad y temperatura. Según esta investigación, esta energía oscura, responsable de mantener al universo en expansión, se estaría debilitando. Como consecuencia, el universo entraría en un estado de desaceleración y contracción hasta morirse o renacer.
Este momento de contracción, según la teoría del Big Crunch (Gran Colapso), llegaría antes de lo esperado: dentro de 65 millones de años. Aunque para la mayoría de las personas parecería ser un tiempo extremadamente lejano, para los científicos representa un lapso de tiempo muy corto.
“Si retrocedemos 65 millones de años, veremos que el asteroide Chicxulub golpeó la Tierra y eliminó a los dinosaurios. En una escala cósmica, 65 millones de años es un periodo extraordinariamente corto” explicó el físico Paul Steinhardt, coautor de esta teoría, en diálogo con Live Science. “Este nuevo escenario concuerda naturalmente con las teorías recientes de la cosmología cíclica y las conjeturas sobre la gravedad cuántica”, agregó el experto.
Qué es la energía oscura
Esta energía oscura a la que se refieren los científicos se trata de una fuerza que representa el 70% de la masa-energía del universo y su función es mantener alejados a objetos peligrosos del universo. En este sentido, Steinhardt destacó que si se deteriora demasiado pronto, “la propiedad antigravitatoria de la energía oscura desaparece, y vuelve a convertirse en algo más parecido a la materia ordinaria”.
Se cree que el fin del universo podría ocurrir de distintas maneras. Algunos expertos aseguran que el universo se enfriará tanto que será imposible que haya vida en él. Esta teoría es conocida como Big Freeze y sostiene que, si esto ocurre, las estrellas dejarían de nacer, las galaxias se oscurecerían y solamente quedarían la energía y las partículas subatómicas. Hasta ahora, esta es una de las teorías más aceptadas por los científicos junto con la del Gran Colapso.
Otra famosa teoría es la del Big Bounce, que sostiene que el Big Bang fue un comienzo de un período de expansión al que le siguió un período de contracción. Según esta teoría, no está comprobado que actualmente estemos viviendo en el primer universo de todos, sino que podríamos estar en el segundo, tercero o que incluso hayan existido millones de otros universos antes de este.