La escena que vivieron las empleadas de limpieza de un hotel de San Luis fue, por lo menos, llamativa e insólita. Y para muchos también podría ser de terror. Cuando ingresaron para limpiar el baño de una habitación se encontraron con una impresionante serpiente pitón de cinco metros y unos 40 kg. Inmediatamente dieron aviso a las autoridades, que comenzaron con el plan de rescate del espécimen.
El personal de limpieza del hotel ubicado en la calle Tissera de la Villa de Merlo se encontró con la sorprendente imagen mientras hacían el recorrido rutinario de limpieza. Al intentar ingresar al baño de una de las habitaciones notaron que la puerta estaba particularmente pesada. Cuando pudieron abrirla se sorprendieron al ver una inmensa pitón junto a una valija vacía que se estaba devorando un pollo.
Cuando las autoridades consultaron con la persona que alquilaba la habitación sobre el animal, el hombre les indicó que era su mascota, la había recibido el miércoles y que su intención era llevársela a su hermano a Villa Mercedes, a 180 kilómetros de distancia. Pero no pudo presentar ningún tipo de documentación que acreditara su versión, informó un agente de Defensa Civil que participó del rescate. Se presume que su destino era alguna clase de operación clandestina en el mercado negro.
El operativo de rescate estuvo a cargo de la Policía Ambiental, Defensa Civil, Bomberos Voluntarios y personal de la Secretaría de Medio Ambiente y Parques. La pitón fue llevada al Centro de Conservación de Vida Silvestre en la Reserva Florofaunística de La Florida para que recibiera la atención veterinaria correspondiente. Las autoridades gubernamentales y ambientales ahora se encuentran en la búsqueda de un destino propicio para reinsertarla en la naturaleza.
El hombre que tenía en su poder a la serpiente deberá dar las explicaciones correspondientes a la acusación por tráfico de fauna que se está investigando. La serpiente pitón (Pythonidae) no es un animal originario de Argentina, por lo que también tendrá que explicar cómo la obtuvo. Según informó un periodista local, el hombre que alquilaba la habitación comentó que la serpiente podía atacar si pasaba alguien que "olía a animal".
Sin embargo, no es la primera vez que esta persona es encontrada en esta situación. En diciembre del 2019 ya se le había decomisado una pitón albina que tenía en su domicilio, en la ciudad puntana de Villa Mercedes. En esa oportunidad, el bífido fue trasladado a un parque zoológico de Tigre, en la Provincia de Buenos Aires.