"Recatate con los pibes", de Mariano Corbacho y Marcos Coria, indaga en los motivos y aprendizajes de las tomas de colegios en la Ciudad de Buenos Aires en 2015, con entrevistas en primer plano a los estudiantes en una película que se estrena este jueves en salas.
"Al ver en 2015 esas marchas masivas de estudiantes secundarios, que se repetían en ciclos de cada dos años en la Ciudad de Buenos Aires, nos surgió el interrogante sobre qué niveles de organización, qué debates y qué sueños tenían las nuevas generaciones que se organizan en sus espacios de estudio", dijo Corbacho a Télam.
El realizador llega a esta cinta luego de la muy atractiva "70 y Pico", en la cual se encuentra con la disyuntiva de retratar a su abuelo Pico y su función como decano interventor en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UBA (1976-1982). Aquella cinta exuda la tirantez que existe entre la intimidad familiar y los crímenes de lesa humanidad de los 70.
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En "Recatate con los pibes", los realizadores llevaron a cabo lo que se puede denominar como "documental urgente", saliendo a captar imágenes y testimonios en el mismo momento que suceden los hechos, lo cual le aporta frescura al tema, aunque se aleja de la reflexión. Así, se aborda cómo el feminismo y la violencia de género interpela a las nuevas generaciones, pero se pasa por alto la denuncia de abuso sexual sucedida en una de las tomas.
"También podemos decir que nos movilizaba un poco la bronca de ver el ninguneo que muchos medios de comunicación hegemónicos tenían para con los pibes. Cuando les ponían un micrófono o los llevaban a los programas de televisión, intentaban ridiculizarlos, prepoteándolos e infantilizándolos", señaló Corbacho.
De hecho, este tema se lleva una buena parte de la película y recuerda a los debates en los que varios periodistas emitían frases entre hirientes y descalificadores a los entrevistados que, en todos los casos, no dejaban de ser adolescentes.
"Nosotros sentíamos que teníamos mucho que aprender de sus experiencias, porque entendemos que no es fácil lograr esos niveles de coordinación, llegando por momentos a movilizar 2.000 o 3.000 estudiantes, y mucho menos sostenerlo en tiempo, como sí lo hace el movimiento estudiantil secundario porteño (...). Un poco, la peli la hicimos pensando en ese déficit que sentimos que existe en la representación audiovisual adolescente", explicó.
Télam: ¿Creés que el filme puede ser interpretado como un "coming of age" documental?
Mariano Corbacho: Para nuestra película, logramos entrevistar durante varios años a los mismos referentes estudiantiles. Este proceso de evolución que marca el género, sin duda que podría trazar un puente con nuestro docu: los pibes y pibas crecieron y cambiaron. Pero lo que sí no cambió a lo largo del tiempo fue su vocación por la defensa de lo público como bandera.
T: ¿Qué creés que se logró desde ese momento?
MC: Robustecieron sus espacios como los centros de estudiantes, generaron herramientas de coordinación a lo largo y ancho de la Ciudad como la Coordinadora de Estudiantes de Base, estuvieron a la vanguardia en discusiones como la No Implementación de la Escuela Secundaria del Futuro. Y ni que hablar que un logro que ha dejado ese proceso organizativos de los pibes y pibas, es gestar desde su lugar en la escuela, debates en torno a la visibilidad de las disidencias sexuales, como también a en lo que hace a la cuestión de género en términos amplios.
T: ¿Por qué este tipo de reclamos se dan en CABA y no en provincias donde las condiciones son peores?
MC: Yo creo que ese proceso no se da exclusivamente en CABA, por caso, los estudiantes de Chubut, gestaron procesos similares durante el 2018 y 2019 y Córdoba y La Plata no son excepción. También podemos mencionar casos como los de El Nacional de Banfield o el proceso de acompañamiento y debate que se dio en todo el corredor de la Zona Oeste tras el fallecimiento de Sandra y Rubén por la explosión de la escuela de Moreno.
Con información de Télam