"Es necesario ordenar el 911 y 101, porque quienes amenazaron en el domicilio propiedad del presidente Macri hicieron 9.000 llamadas al 911 y 11.000 en total si se cuentan también las que hicieron al 101, con lo cual todos los sistema de alerta explotan", sostuvo la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien pidió que "que la gente sepa que la amenaza no es gratuita".
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"Es una locura, y lo vamos a ordenar. Habrá que buscar un sistema de alerta para que cuando se llama mucho de un mismo teléfono, se pueda saber", aseveró, y adelantó que se va a implementar un sistema por el cual cuando se llame más de 10 veces al 911 se active un alerta, para que no se utilice un número de emergencia "de manera distorsionada".
La funcionaria lanzó una advertencia a quienes cometen estos hechos: "Los iremos a buscar y van a tener un proceso penal". En declaraciones a radio Mitre, reveló que "anoche se detuvo a una persona más", con lo que "hay tres detenidos".
"Estamos cansados de que estas cosas pasen y hasta ahora no se hacía nada, hemos decidido actuar", expresó.
Respecto a las amenazas que dijo haber recibido la ex presidenta Cristina Kirchner, Bullrich señaló que "se investigará con la misma celeridad que se viene investigando todo".
La ministra destacó la resolución del juez Ariel Lijo que no sólo detuvo a la persona que amenazó vía Twitter a la hija del Presidente, sino que además le dictó un embargo por el uso de servicios del Estado, ya que cuando hay una amenaza, explicó, "el Estado debe incrementar los niveles de seguridad de la persona y de los lugares, y esto tiene un costo".
"Es una muy buena modalidad porque además de una denuncia penal, hay también una denuncia civil", concluyó la funcionaria respecto a la decisión de la Justicia.
Este fin de semana, dos amenazas de bomba fueron realizadas por teléfono, dirigidas a Mauricio Macri, al departamento de su propiedad en Libertador 2712, que está alquilado a su íntimo amigo, Gustavo Aribas, titular de la AFI.
El caso ocurrió una semana después de la detención en el barrio porteño de Villa Urquiza de dos jóvenes (tío y sobrino) que se hicieron pasar por terroristas de ISIS en Twitter.
La flamante Unidad de Investigación Antiterrorista detectó los llamados de dos líneas telefónicas durante un lapso de siete meses, en la investigación conducida por el juez federal Sebastián Ramos.