El asesor Jaime Durán Barba suele ser bastante explícito durante sus entrevistas. Es una característica que, en general, rechaza en sus asesorados, a los que pide las menores definiciones posibles, a fin de no empantarse en el lógico barro de la política -con los posteriores informes editados de TV, por ejemplo,que amplifican los dichos-. Pero al considerarse un "outsider" del mundo de la política, él se mueve con parámetros más flexibles. Y lo hace a prueba y error (con bastante de error), dejando claro que es más hábil tras bambalinas que con las luces del show frente a su rostro.
Esto quedó demostrado recientemente, en una esclarecedora nota con Canal 26. "Cuando el presidente Mahuad, del que yo fui Jefe de Gabinete, tomó las mismas medidas, perdió 130% en 3 semanas. Tenía 70% de imagen positiva y pasó a 60% de imagen negativa. Y después se cayó del gobierno" dijo el asesor ecuatoriano, ante la sorpresa del entrevistador. "¿Pero medidas gradualistas?" fue cuestionado Barba. "Parecidas a estas. Si, fueron más bien gradualistas" cerró el ecuatoriano, quien se río ante la situación, posiblemente desbordado.
Si uno revisa las medidas políticas y económicas de Mahuad comprenderá que Durán Barba entraba en un terreno espinoso durante la entrevista. De gradualismo no hubo demasiado en aquella experiencia: feriado bancario y congelamiento de depósitos en marzo de 1999, para el salvataje de la banca privada; cierre del Banco del Progreso; inflación anual que pasó del 36% en 1998 a 97% en el 2000; y dolarización de la moneda nacional, con la pérdida de la soberanía monetaria que esta decisión implica -y que aún hoy arrastra el país ahora gobernado por Rafael Correa Delgado.
Quien puso el sello a buena parte de esas políticas ortodoxas fue Domingo Cavallo, que insólitamente defendió, el año pasado y en su página web, su accionar durante aquellos años. "Cuando Jamil finalmente decidió dolarizar, la crisis comenzó a resolverse, exactamente como se resolvió en Argentina a partir de abril de 1991 con la convertibilidad. Lamentablemente para Jamil y Ecuador, le hicieron un golpe antes de que pudiera recoger los frutos de la dolarización" cuenta cual fábula el tristemente célebre ex Ministro de Economía argentino quien, como Durán, asesoraba al todavía presidente Mahuad. Cavallo desmiente a su socio de época: las políticas fueron de shock, aún cuando busque culpar a un gradualismo que no existió.
Los cinco meses iniciales de Macri muestran un extraño "gradualismo": tarifazos a los servicios públicos que ya provocan el cierre de pequeñas y medianas empresas, 154 mil despidos, 1 millón y medio de nuevos pobres, y el veto a la propia ley antidespidos grafican un escenario preocupante. En definitiva, un aumento de la pauperización social -cada vez más evidente, palpable en las calles- a costa de maximizar las ganancias de unos pocos. Suena similar al primer año de Mahuad, lamentablemente. Posiblemente por ello resulta más extraña la nerviosa risa de Durán, quien además fue luego al programa de Mirtha Legrand, negando un aumento de la pobreza ante la incrédula mirada de todos los presentes. Incluso la propia Legrand, conocida defensora del PRO, lo cuestionó abiertamente. Es que Durán, famoso por su libro "El arte de ganar", tiene pendiente otra obra: "El arte de gobernar". A juzgar por su asesoría al gobierno de Mahuad y sus primeros meses aconsejando a los Mauricios (Rodas en Quito, Macri en Argentina), gobernar es bastante más complejo que ser un simple gurú del marketing electoral.
Pretendemos cerrar con una breve conclusión y algunas preguntas. Durán le explicó a Sturzenneger, según el propio presidente del Banco Central contó antes de llegar a ese cargo, algunos consejos para un debate público. "No propongas nada" y "no expliques nada" fueron los dichos del asesor ecuatoriano. Esta revelación, la de la no verbalización de lo que se va a hacer -o su negación, tal como sucedió en el debate Macri vs Scioli antes del ballotage, donde el actual presidente negó las políticas de shock- es la que explica un triunfo pírrico que al día de hoy ha cambiado los pilares fundamentales del Estado en Argentina. ¿De que se ríe Durán Barba, entonces? ¿De abrirle las puertas, una vez más, a un nuevo ajuste en América Latina tras un velo de "gradualismo" que aún no hemos conocido? ¿De negar un aumento de la pobreza cada vez más evidente a partir de diciembre pasado? Si fuera uno de sus asesorados, el mismo debería autoaconsejarse moderar sus apariciones en TV.
Politólogo UBA / Investigador IIGG-UBA, CCC